Évora es sin duda uno de los grandes tesoros de Portugal
Marcada por su belleza, sencillez y fuerte trasfondo histórico, Évora es sin duda uno de los grandes tesoros de Portugal. Conocida también por ser la capital del Alentejo, a unos 30 kilómetros de Montemor-o-Novo y al sur del río Tajo, esta discreta ciudad agradará a la vista y al espíritu, haciendo que su experiencia sea realmente inspiradora e inolvidable.

En una sociedad que rinde culto a lo moderno, descubrirá que el pintoresco encanto de Évora no sólo es un refugio perfecto, sino también el lugar ideal para empaparse de una verdadera sensación de tranquilidad. Este "museo al aire libre", con sus típicas calles estrechas y empedradas, sus excepcionales monumentos y su mezcla de diferentes estilos arquitectónicos, le hará apreciar cada superficie sobre la que ponga sus ojos.

Sobreviviendo a una larga historia, Évora puede considerarse un retrato vivo de la influencia romana y árabe que ha permanecido desde el siglo II. Originalmente llamada Liberalitas Julia por los romanos, esta ciudad también fue objeto de invasiones bárbaras bajo el poder visigodo, de la conquista islámica en 715, y no fue hasta 1166, de la mano del caballero cristiano Geraldo Sem Pavor, cuando la ciudad se convirtió en uno de los centros más importantes del país durante la Edad Media.

La conservación de numerosos lugares y cultura, como la hermosa Iglesia de Santo António y la famosa Praça do Giraldo, el indestructible templo corintio romano de Évora (mal llamado Templo de Diana), la megalítica Cromeleque de Almendre y las auténticas murallas medievales, son sólo algunos ejemplos que justifican que Évora sea Patrimonio Mundial de la UNESCO desde 1985.

Una vez en el Alentejo, hay que saborearlo. No dude en sentarse a disfrutar de una comida tradicional de Carne de Porco a la Alentejana (con almejas y cilantro) y una copa del rico vino regional. Son pequeños placeres que complementarán sin duda el disfrute de su estancia, así como la cálida acogida que seguro recibirá de los lugareños.

Tanto si va a Évora de vacaciones solo, con la familia o para una escapada corta, descubrirá que la ciudad tiene una esencia especial que le envolverá rápidamente. Évora es más que una ciudad. Es artística, es cultural y es mágica. Según el Premio Nobel de Literatura portugués José Saramago, "Évora es un estado de ánimo".